Tras una de las sagas cinematográficas mas exitosas del cine se encuentra una historia real de boxeo. O por lo menos una historia, con nombre y apellidos, que sirvió de inspiración a Sylvester Stallone para dar inicio al personaje que le encumbraría en la meca del cine.
El 29 de junio de 1970 Chuck Wepner, buen boxeador a nivel local pero desconocido en los grandes cuadriláteros, se enfrentaba al ex campeón mundial Sonny Liston en el Armory, el centro de entrenamiento de la Guardia Nacional de Nueva Jersey. Durante el combate Chuck Wepner recibió un durísimo castigo. La contienda fue detenida en el noveno asalto, ante la disconformidad de Wepner. Aquella noche, sentado en primera fila, Muhammad Ali fue testigo de todo.
La idea del famoso promotor de boxeo, Don King, era enfrentar a Wepner con Foreman, ya que pensaban que el campeón imbatido retendría el título en Kinshasa. Sin embargo, Ali derrotó a Foreman, aun así King decidió mantener el combate contra Wepner.
La pelea debía ser casi un entrenamiento para el campeón, ya que era la primera defensa del título tras haber derrotado a Foreman en Kinshasa. Alí subestimó a Chuck Wepner, como hace Apollo Creed en la película. Llegó con escasa preparación al combate que se celebró el 24 de marzo de 1975, en el Richfield Coliseum, en Ohio.
En cambio, por primera y única vez Chuck Wepner se entrenó con dedicación completa. Abandonó durante un par de meses su trabajo en la distribuidora de bebidas, mientras Phyllis, su primera esposa, trabajaba de noche en la oficina de correo de Bayonne.
A lo largo del combate, Wepner peleó de manera casi heroica, tal y como hacía Rocky en sus películas. Aguantando el paso de los asaltos al campeón del mundo. En el noveno asalto ocurrió lo impensable. Con un derechazo a las costillas Wepner se convirtió en el cuarto hombre en derribar a Ali. Los otros habían sido Sonny Banks, Henry Cooper y Joe Frazier. Ali se repuso y, herido en su orgullo, logró noquear a su rival en el último asalto, cuando solo quedaban 19 segundos para finalizar el combate. Las similitudes con el primer combate de Rocky son evidentes. Pero en la vida real no hubo revancha.
Solo un año después del combate, Silvester Stallone estrenó Rocky, la primera gran película de la saga que fue todo un éxito de público y crítica. Esa primera entrega ganó 3 premios Oscar, a mejor película, director y montaje.
En 2003, Chuck Wepner demandó al actor por los derechos de la historia. Alegando que le habían prometido una compensación económica que no había percibido. Y es que es cierto que Stallone nunca negó que se había inspirado en Wepner. Finalmente, en 2006 llegaron a un acuerdo económico entre ambas partes. Aunque no se hizo pública la cantidad, se cree que la cantidad puede oscilar entre los 10 y 15 millones de dólares.